Centro de Entrenamiento Marangoni
La prueba cardiopulmonar del ejercicio combina la espirometría con la ergometría ofreciendo un estudio no invasivo que evalúa la respuesta integral del organismo frente al ejercicio físico.
Este análisis de los gases respiratorios espirados durante el estrés fisiológico permite determinar con precisión y reproducibilidad la capacidad funcional. Además posibilita la prescripción certera de programas de ejercicio por una medición directa.
En el caso de deportistas de élite resulta invaluable para la prescripción individualizada del entrenamiento.
Esta personalización contribuye a optimizar el rendimiento, fomentando mejoras deportivas y previniendo lesiones asociadas al sobreentrenamiento.
Dras. Teresa García Botta y Nicole Herzkovich.
Objetivos del estudio
- Evaluación del rendimiento cardiovascular y respiratorio: permite medir la capacidad del sistema para suministrar oxígeno a los músculos durante el ejercicio.
- Determinación de umbrales aeróbicos y anaeróbicos: facilita la identificación de los puntos en los que un atleta transita de un estado predominantemente aeróbico a uno anaeróbico durante el ejercicio, siendo esencial para diseñar programas de entrenamiento específicos y mejorar el rendimiento.
- Optimización de zonas de entrenamiento: basándose en datos recopilados, los entrenadores pueden personalizar las zonas de intensidad de entrenamiento, maximizando la eficiencia y mejorando la capacidad aeróbica y anaeróbica del deportista.
- Análisis de la eficiencia del metabolismo energético: permite evaluar cómo el cuerpo utiliza sustratos energéticos, como carbohidratos y grasas, durante el ejercicio, esencial para planificar estrategias nutricionales específicas.
- Seguimiento del progreso: realizar pruebas periódicas ayuda a monitorear el progreso del deportista a lo largo del tiempo.
- Detección de limitaciones fisiológicas: puede identificar posibles limitaciones pulmonares o cardiovasculares que afectan el rendimiento.
Consultas y turnos